Me tengo que confesar y confieso que me encanta la fruta... pero también las golosinas... Los niños no son niños si no pueden comer alguna golosina o chocolate. Es uno de los grandes placeres de la infancia. Los niños pueden comer golosinas pero eso sí, con moderación porque sino los dientes se estropean. Y las mamás aprovechamos para comer alguna que otra sin que nos vean, hay que dar ejemplo. Las golosinas forman parte del mundo de los pequeños y para los mayores no está muy bien visto. A mi me da igual, compartir con mi hijo un tiburón es un gran placer de esta vida. Nos ponemos las botas! En contrapartida comemos también mucha fruta juntos! Siempre el tema de encontrar el equilibrio.
#soygolosayloasumo. #medaigualtodo #compartirunagolosinaconmihijo #dietamediterranea
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